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IM Defensoras: Hate crime against Sherly Montoya, LGTTBI defender and member of Transexual Women´s Group “Muñecas de Arcoiris”
The Human Rights Council (HRC) is the key intergovernmental body within the United Nations system responsible for the promotion and protection of all human rights around the globe. It holds three regular sessions a year: in March, June and September. The Office of the UN High Commissioner for Human Rights (OHCHR) is the secretariat for the HRC.
Debating and passing resolutions on global human rights issues and human rights situations in particular countries
Examining complaints from victims of human rights violations or activist organizations on behalf of victims of human rights violations
Appointing independent experts (known as “Special Procedures”) to review human rights violations in specific countries and examine and further global human rights issues
Engaging in discussions with experts and governments on human rights issues
Assessing the human rights records of all UN Member States every four and a half years through the Universal Periodic Review
AWID works with feminist, progressive and human rights partners to share key knowledge, convene civil society dialogues and events, and influence negotiations and outcomes of the session.
¿Quieren sumarse al creciente número de personas que le están diciendo «basta» a la infiltración de lxs actores anti-derechos en la ONU?
Por María Bonita - Venezuela
Las ancestras hacen un círculo
Sagrado, vivo, poderoso
Estamos en el medio
Sintiendo su fuerza.
Suena el tambor de la tierra
Nuestra piel se viste de colores
Somos verdes, rojas, naranja, azules, violetas, negras
Suena el tambor de la tierra
La voz vibra, el grito ocupa, el canto se presenta, arrulla el sueño, despierta conciencia.
Suena el tambor de la tierra
Y la mirada se hace cómplice, amiga, profunda.
Suena el tambor de la tierra
El corazón es uno solo, percuta el alma, nos invita a movernos, nos vuelve deseo, nos indica un camino.
El de la juntanza comunera, el del poder popular, el del autogobierno, el de la revolución de las mujeres, el del cuidado subversivo.
Suena el tambor de la tierra
Y yo les invito a entrar, a ser voz, piel, mirada, semilla, fuego, canción, comunión.
Suena el tambor de la tierra
Y yo les invito a descubrirla, a amarla, a conocerla, a defenderla, desde el corazón de la comuna
Hace 25 años que habitan las mismas calles polvorientas, en lo más alto de una loma con nombre de león, vienen de diferentes lugares, muchas con tradición campesina, tienen la piel color rebeldía, color cardón, porque en ellas habita el semiárido larense, de allí su amor por la vida, su aprecio, el cuidado y resguardo por el agua y el territorio, es que son herederas de la estirpe Gayón, Ayaman, comunidades indígenas que habitaron y habitan el norte del estado Lara.
Desde muy jóvenes aprendieron que la maternidad es un signo del que no se escapa con facilidad, cuidar a los hijos, la casa, el marido, lavar, planchar, cocinar, fregar, todo tenía que estar impecable, insisten.
Y la vida era eso, eso y la violencia, el insulto, el maltrato, el golpe, el reclamo, la queja era algo de esperar, algo que parecía natural, así se vivían los días, la cotidianidad, en aquellas calles de tierra viviendo en pequeñas casitas de chapa, de zinc, sin servicios básicos, esa era pobreza, la precariedad cuando llego un hombre, si, un hombre, un proyecto, una revolución inusual porque se hizo sin la guerra.
Entonces las invitaron a salir, las invitaron a tomar la calle, el espacio público y ellas en ese proceso derribaron puertas y ventanas, rompieron cadenas, se soltaron el cabello, se sintieron libres, libres cimarronas, rebeldes caribes, guerreras libertadoras.
Y es que eso de independencia y soberanía es algo que las que pudieron estudiar lo habían leído, pero sentirse, sentirse protagonistas de un proceso de cambio de transformación social, eso es una importante conquista que tenemos que mencionar, que no podemos olvidar.
En lo alto de esa loma se siente la complicidad, el fuego compartido, los años de lucha, cuentan que una de ellas se iba con su paragua por las tardes y de casa en casa tomando un cafecito, conversando con la gente iba convocando, convenciendo
¡Vamos a hacer el consejo comunal!
¡Avancemos hacia la comuna!
Hagamos planes de trabajo para la educación, el deporte, la salud, la alimentación, el comité de mujer e igualdad de género, la economía.
¡Vamos a ser Gobierno Popular para que el Barrio se Ponga Bonito!
Y así llegaron las casas, el consultorio popular, el simoncito, el proyecto de electrificación, el de agua potable son algunos de los logros comunales, de los sueños comunales hechos realidad.
Y ustedes se preguntaran como llego una cuentera, una cuenta cuentos a esa loma con nombre de león
Y yo les digo: es que nací bochinchera, dando pelea, nací callejera diría mi abuela, disposicioner agregaría el Comandante Chávez, de tanto andar, renegar, pelear y dudar de aquel militar, me termino convenciendo con el proyecto comunal, con eso de ser autogobierno, de que el pueblo administre sus recursos, con eso de todo el poder para las comunas, con eso me convenció.
Pero yo sabía que algo faltaba porque las mujeres, las mujeres comuneras seguimos construyendo poder popular y nuestro corazón se viste de lucha antiimperialista y anticapitalista pero hay algo que nos duele, que nos sigue afectando, hay heridas del patriarcado que están presente.
Entonces un día, me descubro llorando y sonó el tambor de la tierra y las ancestras hablaron.
Me vi rodeada de un grupo de mujeres que me sostuvo, me contuvo mientras me derramaba frente a ellas, mientras dolía y me liberaba al mismo tiempo, así que descubrí que el amor entre mujeres te sana, te salva, que nuestra amistad en profundamente política y que la sororidad es una manera de andar, de vivir la vida, a partir de ese momento no me volví a sentir sola, no me sentí más nunca una isla, porque sé que hay un grupo de mujeres que me llevan, me traen, me aman, me cuidan y viceversa, sé que esta forma de hacerme feminista con la mística de mujeres por la vida es una experiencia de sentirse conectada, amada por mujeres aunque no las vuelvas a ver, entonces como no querer que esto que me ocurrió, le pase a otras, este amanecer, este parirme un nuevo corazón es un regalo de las diosas que tiene que ser compartido.
Por eso decidí unirme a ellas y echar a andar por las comunas, comencé a caminar, a conocer otras experiencias, comenzamos a debatir sobre salud, educación, alimentación, nos fuimos predicando el verbo antipatriacal y las comunas libres de machismo, insistimos en recuperar la sabiduría ancestral, la intuición, decidimos defender la vida hablando de aborto y nos vemos riendo, llorando, debatiendo, reflexionando, me encuentro con macu, con la china, yenni, carolina, maria, ramona, irma y hasta con nuestra hermana yenifer que se nos fue hace poco.
Este es mi homenaje a ellas, a las mujeres loma a las mujeres leonas, ellas sin duda se sembraron en mí con tanta fuerza que son parte de mis latidos.
Ellas sin duda marca un camino, ellas son las que hacen posible el cuidado familiar, el cuidado colectivo, ellas son también una fuerza, una fuerza en el territorio para superar el bloqueo, la violencia patriarcal, la traición política, para superar la burocracia la corrupción.
Ellas sin duda marcan un camino
Ellas sin duda son una brújula
Ellas sin duda son el corazón de la comuna
Gracias.
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IM Defensoras: Hate crime against Sherly Montoya, LGTTBI defender and member of Transexual Women´s Group “Muñecas de Arcoiris”
Les langues de travail de l'AWID sont l'anglais, le français et l'espagnol. Le thaï sera ajouté comme langue locale, ainsi que la langue des signes et d'autres mesures d'accessibilité. D'autres langues étant susceptibles d’être ajoutées si le financement le permet, nous vous invitons à consulter régulièrement les mises à jour. La justice linguistique nous tient à cœur et nous essaierons d'inclure autant de langues que possible en fonction de nos ressources. Nous espérons créer de multiples occasions pour que chacun·e d'entre nous puisse s'exprimer dans sa langue et communiquer avec les autres.
Ghiwa Sayegh es una anarcoescritora queer, editora independiente y archivista. Es la editora fundadora de Kohl, una revista para la investigación sobre cuerpo y género, y la cofundadora de Intersectional Knowledge Publishers. Posee una maestría en estudios de género de Université Paris 8 Vincennes, Saint-Denis. Le apasionan la teoría queer, las circulaciones transnacionales y las historias imaginadas o desconocidas. Sus influencias son Audre Lorde y Sara Ahmed.
par Marianne Mesfin Asfaw
J’ai de nombreux souvenirs émotifs de mon aventure vers le féminisme, mais un en particulier me vient à l’esprit. Je suis alors en études supérieures, à une conférence dans le cadre d’un cours sur la théorie féministe. La conférence porte sur le féminisme africain et la professeure nous parle de l’histoire du panafricanisme et explique en quoi ce mouvement est patriarcal, centré sur les hommes, et comment les universitaires panafricanistes perpétuent l’effacement des femmes africaines. Elle commente la manière dont les contributions des Africaines aux luttes anticoloniales et décoloniales sur le continent ne sont que rarement, voire jamais l’objet de discussions et que l’on ne crédite que rarement les autrices. Nous lisons alors des textes sur des universitaires africaines féministes qui remettent en question cet effacement et mettent en lumière les récits de mouvements et efforts de résistance menés par des Africaines. Cela semble naïf, mais ce qui me paraissait le plus frappant était que l’on puisse juxtaposer les termes « africaine » et « féministe ». Et également que nous étions très nombreuses dans les différents coins du continent à nous débattre avec une histoire, des politiques et des normes sociétales compliquées, que nous envisagions cependant toutes selon le prisme du féminisme. Je suis sortie de cette conférence à la fois émue et complètement chamboulée. Trois de mes amies (toutes féministes africaines) et moi-même sommes sorties discuter du contenu de ce que nous venions d’entendre. Nous étions ébahies par l’excellence de la conférence et du contenu mais, plus que tout encore, nous nous sentions véritablement vues. Et c’est cette sensation qui m’est restée.
Tomber en amour avec le féminisme était époustouflant. C’était comme de finalement pouvoir parler à un coup de cœur de longue date, et de se rendre compte qu’on lui plaît aussi. Je parle de coup de cœur parce qu’au lycée je me disais féministe, tout en sentant que je n’en savais pas assez. Y avait-il une bonne manière d’être féministe? Et si je ne m’y prenais pas bien? Ma première conférence en Études féministes a répondu à toutes ces questions. C’était génial d’apprendre toutes ces histoires de résistance féministe et de démantèlement du patriarcat. Je sentais que je m’affirmais et que j’étais validée, mais je sentais également qu’il manquait quelque chose.
Approfondir ma relation avec le féminisme dans une institution universitaire où la majorité des élèves et du corps enseignant étaient blancs signifiait que pendant ces premières années, nous ne discutions que rarement de la place de la race ou du dénigrement des Noir·es dans les mouvements féministes traditionnels. Dans la plupart des cours, il y avait peut-être une semaine, ou pire une seule séance qui portait sur la race et nous lisions alors généralement un texte de bell hooks ou de Kimberly Crenshaw sur l’intersectionnalité, et peut-être un autre de Patricia Hill Collins. Et la semaine suivante, nous continuions à botter le sujet en touche. Je gérais cette situation en incluant la race et le féminisme noir dans presque tous mes travaux, en écrivant sur les cheveux des Noir·es et la politique de respectabilité, sur l’hypersexualisation du corps des femmes noires, et bien plus encore. Avec le temps, j’ai pris conscience que je tentais de combler une lacune, sans toutefois saisir laquelle.
Découvrir le féminisme africain et en apprendre davantage me permettait de boucler la boucle. Je comprenais que j’avais encore tant de choses à apprendre. Et principalement, que mon africanité et mon féminisme politique n’avaient pas à être écartés. Ils avaient en réalité tant à apprendre l’un de l’autre, et des féministes africaines faisaient déjà ce travail. C’était la pièce manquante et insaisissable lors de mon exploration du féminisme pendant mes années universitaires.
Pour moi, le féminisme est l’antithèse de l’apathie sociale et politique. Il signifie également que dès lors que l’on adopte une optique féministe, plus rien ne peut être pareil. Mes amies et moi parlions de ce que ça fait de mettre des lunettes qu’on ne peut plus jamais enlever, parce que l’on voit le monde pour ce qu’il est, avec tout son désordre. Un désordre qu’on ne peut pas simplement ignorer ou laisser tomber. J’ai donc fait la promesse aux mouvements féministes de ne jamais arrêter d’apprendre, de continuer à étirer les limites de mon empathie et de ne jamais vivre passivement. De dédier davantage de temps et d’espace dans ma vie aux mouvements féministes et de continuer à amplifier, célébrer, documenter et citer les travaux de féministes africaines. Je m’engage également à placer l’attention et le soin au centre de tout et à donner la priorité au plaisir dans cette aventure féministe, parce que nos mouvements en ont besoin pour durer.
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La montée en puissance des antidroits a préparé son terrain. Nous devons comprendre la montée de l’ultranationalisme, du pouvoir incontrôlé des entreprises, de la répression croissante et de l’amenuisement de l’espace civique pour contextualiser les menaces actuelles contre nos droits.
avec Luam Kidane, Mariama Sonko, Yannia Sofia Garzon Valencia et Nomsa Sizani.
How does a movement start?
we get expelled by ghosts from a house, a family, and a nation
we arrive fatigued to a space (sometimes an actual address) but mainly to a state of being
preceded by a fallen star
perhaps our arrival isn’t accompanied by fatigue,
maybe accompanied by fear
perhaps our arrival isn’t accompanied by fear
maybe accompanied by anger
from issues that keep on repeating themselves:
a stab in the heart (read heartache)
a bullet in the back (read betrayal)
forced disappearances
bodies sentenced by marriage, disfiguration, and chronic fatigue
yet when we arrive, we gather, whisper, speak and weep.
This is how our movements begin when we arrive at each other
We become seeds,
This is how our movements start when we plant each other
Becoming flowers, sometimes just thorns, sometimes fruits,
we are each other’s oasis
to sing for the battles
to make remedies
to place the faces of our lovers, the shape of their smiles, the sound of their laughter
the secret of turning silences into language
the detailed instructions of witches
our movement is: for all of us
when we arrive as seeds with the purpose of flowering.
Sara AbuGhazal
www.badiya.blog
Nouveaux
Les participant.e.s se rassembleront physiquement sur un certain nombre de sites en dehors du site de Bangkok, dans différentes parties du monde, chaque jour du Forum. Tous ces sites auto-organisés seront virtuellement connectés au site du Forum à Bangkok pour des sessions conjointes et hybrides. Tout comme pour les personnes se connectant en ligne, les participant.e.s au Hub pourront animer des sessions, participer à des conversations et profiter d'un programme riche et diversifié.
Les lieux de rencontre seront annoncés en 2024.
Chinelo Onwualu est une conseillère éditoriale ayant près de 10 ans d’expérience dans l’élaboration de communications stratégiques pour des organisations à but non lucratif du monde entier. Elle a notamment travaillé pour ActionAid Nigeria, The BBC World Trust, Open Society Initiative for West Africa (OSIWA) et l’AWID. Elle est titulaire d’un master en journalisme de l’Université de Syracuse et a travaillé comme rédactrice, éditrice et chercheuse au Nigeria, au Canada et aux États-Unis. Elle est également l’éditrice non-romanesque du magazine Anathema et cofondatrice d’Omenana, un magazine de fiction spéculative africaine. Ses nouvelles ont été publiées dans plusieurs anthologies primées et elle a été nominée pour les British Science Fiction Awards, les Nommo Awards for African Speculative Fiction et le Short Story Day Africa Award. Elle est originaire du Nigeria mais vit à Toronto avec son compagnon et son enfant.
Lorsque des milliers de féministes se réunissent, nous créons une grande force de solidarité qui a le pouvoir de changer le monde. Le Forum de l’AWID sera pour nous un moment de repos et de guérison ensemble, de connexion au-delà des frontières et de découverte de nouvelles orientations stratégiques courageuses.
La date et le lieu seront annoncés l'année prochaine, dès que possible. Nous sommes ravi.es et nous savons que vous le serez aussi. Restez à l'écoute!
Assurez-vous de nous suivre sur les médias sociaux et de vous inscrire à notre liste de diffusion pour rester informé!
Panel : Dans le cadre d'une table ronde, explorez une question ou un défi sous différents angles, ou partagez un apprentissage ou une expérience, puis posez des questions à l'auditoire, si le temps le permet.
Talk-show : Organisez une conversation plus spontanée dans le cadre d'un talk-show. Les talk-shows peuvent être une conversation entre plusieurs personnes, animée par un.e présentatrice.eur de talk-show. Les questions du public peuvent déterminer l'orientation de la conversation.
Discussion : Elles peuvent prendre la forme de cafés du monde, de cercles restreints ou fishbowl et d'autres méthodologies qui facilitent l'implication active des participant.e.s dans les conversations. Il s’agit d’un format très participatif.
Atelier : Sessions interactives qui invitent les participant.e.s à acquérir de nouvelles compétences dans tous les domaines de la vie et de l'activisme.
Session stratégique : Il s'agit d'une invitation à réfléchir à une question ou à une stratégie, en profondeur, avec d'autres personnes. Un espace pour apprendre les un.e.s des autres : ce qui fonctionne, ce qui ne fonctionne pas, et comment développer de nouvelles stratégies collectives pour créer les mondes dont nous rêvons.
Cercle de partages (également connu sous le nom de Birds of a Feather) : Idéal pour les petits groupes, dans un cadre plus intime, afin d'écouter les un.e.s et les autres, de susciter la discussion et d'aborder avec soin des sujets qui peuvent être spécifiques, sensibles et complexes.
Arts - Atelier participatif : Activités participatives impliquant les arts et l'expression créative. Qu'il s'agisse d'art visuel, de théâtre, de film, de peinture murale, de danse, de musique, d'artisanat collectif ou de création artistique, etc., nous accueillons toutes les idées célébrant l'art et la créativité féministes en tant que formes de changement social, de guérison, d'expression et de transformation.
Arts - Performances, installations et expositions : Nous accueillons les propositions qui offrent aux participant.e.s du Forum de nouvelles expériences et perspectives, qui élargissent nos horizons et qui nous incitent à penser, ressentir et organiser d'une nouvelle manière.
Guérison : Diverses activités adaptées à la fois aux groupes et aux individus, allant de l'apprentissage de techniques de relaxation à la discussion sur la prévention de l'épuisement professionnel, des pratiques de soins du corps, de l'esprit et de l'âme tenant compte des traumatismes à la guérison et des failles au sein de nos mouvements.