AWID es un organización feminista internacional de membresía, que brinda apoyo a los movimientos que trabajan para lograr la justicia de género y los derechos de las mujeres en todo el mundo.
Lxs defensorxs se identifican a sí mismas como mujeres y personas lesbianas, bisexuales, transgénero, queer e intersex (LBTQI) y otrxs que defienden derechos y que debido a su trabajo en derechos humanos están bajo riesgos y amenazas específicos por su género y/o como consecuencia directa de su identidad de género u orientación sexual.
Lxs defensorxs son objeto de violencia y discriminación sistemáticas debido a sus identidades y su inclaudicable lucha por derechos, igualdad y justicia.
El Programa Defensorxs colabora con contrapartes internacionales y regionales así como con lxs afiliadxs de AWID para crear conciencia acerca de estos riesgos y amenazas, abogar por medidas de protección y de seguridad que sean feministas e integrales, y promover activamente una cultura del autocuidado y el bienestar colectivo en nuestros movimientos.
Riesgos y amenazas dirigidos específicamente contra lxs defensorxs
lxs defensorxs enfrentan los mismos tipos de riesgos que todxs lxs demás defensorxs de derechos humanos, de comunidades y del medio ambiente. Sin embargo, también están expuestas a violencia y a riesgos específicos por su género porque desafían las normas de género de sus comunidades y sociedades.
Por defender derechos, lxs defensorxs están en riesgo de:
Ataques físicos y muerte
Intimidación y acoso, incluso en los espacios virtuales
Acoso judicial y criminalización
Agotamiento
Un enfoque integral y colaborativo de la seguridad
Trabajamos de manera colaborativa con redes internacionales y regionales y con nuestrxs afiliadxs
para crear conciencia de las violaciones de derechos humanos contra lxs defensorxs y de la violencia y discriminación sistemáticas que enfrentan
para fortalecer los mecanismos de protección y asegurar respuestas más oportunas y efectivas para lxs defensorxs que están en riesgo
Trabajamos para promover un enfoque integral de la protección que incluya:
remarcar la importancia del autocuidado y el bienestar colectivo, y reconocer que el significado de cuidado y bienestar puede variar entre las diferentes culturas;
documentar las violaciones dirigidas contra lxs defensorxs usando una perspectiva feminista interseccional;
promover el reconocimiento y celebración social del trabajo y la resiliencia de lxs defensorxs; y
construir espacios ciudadanos que conduzcan al desmantelamiento de las desigualdades estructurales sin restricciones ni obstáculos.
Nuestras acciones
Nos proponemos contribuir a un mundo más seguro para lxs defensorxs, sus familias y comunidades. Creemos que actuar por los derechos y la justicia no debe poner en riesgo a lxs defensorxs, sino que debe ser valorado y celebrado.
Promoviendo la colaboración y coordinación entre organizaciones de derechos humanos y organizaciones de derechos de las mujeres en el plano internacional para fortalecer la capacidad de respuesta en relación a la seguridad y el bienestar de lxs defensorxs.
Apoyando a las redes regionales de defensorxs y de sus organizaciones, tales como la Iniciativa Mesoamericana de Mujeres Defensorxs de Derechos Humanos y la WHRD Middle East and North Africa Coalition [Coalición de Defensorxs de Derechos Humanos de Medio Oriente y África del Norte], promoviendo y fortaleciendo la acción colectiva para la protección, poniendo el énfasis en establecer redes de solidaridad y protección, promover el autocuidado y la incidencia y movilización por la seguridad de lxs defensorxs.
Aumentando la visibilidad y el reconocimiento de lxs defensorxs y sus luchas, así como de los riesgos que enfrentan, a través de la documentación de los ataques que sufren, e investigando, produciendo y difundiendo información sobre sus luchas, estrategias y desafíos.
Movilizando respuestas urgentes de solidaridad internacional para lxs defensorxs que están en riesgo a través de nuestras redes internacionales y regionales y de nuestrxs afiliadxs activxs.
Dilma Ferreira Silva était une activiste de premier plan des droits amazoniens qui s’est battue durant plusieurs décennies pour les droits des personnes affectées par les barrages.
Elle faisait elle-même partie des 32 000 personnes déplacées par Tucuruí, un imposant barrage hydroélectrique, construit au Brésil sous la dictature militaire de 1964-1985.
En 2005, Dilma a été invitée à rejoindre le Mouvement des personnes affectées par les barrages (MAB) au Brésil et, en 2006, elle y a formé un collectif de femmes pour finir ensuite par devenir coordonatrice régionale du mouvement.
Évoquant son activisme, ses collègues racontent :
« Elle se distinguait très rapidement car elle n’avait jamais peur dans la lutte. »
Dilma vivait dans la localité rurale de Salvador Allenda, à 50 kilomètres de Tucuru. Elle a dédié sa vie à mieux protéger les communautés et les territoires affectés par la construction d’énormes projets. Elle était particulièrement préoccupée par l’impact de genre de ce type de projets et plaidait pour les droits des femmes.
Lors d’une réunion d’ordre national du MAB en 2011, Dilma évoqua les femmes affectées par les barrages, soulignant :
« Nous sommes les réelles Marias, guerrières, combattantes ici, nous nous confrontons au défi de la lutte quotidienne. »
Au cours des années suivantes, Dilma a organisé des groupes de terrain du MAB et travaillé avec les communautés pour former des coopératives paysannes qui permirent de mieux distribuer la nourriture au sein des communautés. Ensemble, elles ont amélioré la commercialisation de la pêche et développé un projet de citerne pour un accès à l’eau potable. Elle défendait aussi les agriculteurs·rices dont les terres étaient convoitées par les « grileiros » (personnes qui s’approprient les terres).
Le 22 mars 2019, à l’âge de 48 ans, Dilma, son mari et leur ami·e furent violemment assassiné·e·s. Ces trois meurtres s’inscrivirent dans une vague de violences en Amazonie contre les Movimento dos Trabalhadores Sem (mouvements des travailleurs·ses sans terre) et les activistes écologistes et autochtones.
by Alejandra Laprea, Caracas, Venezuela (@alejalaprea)
I live in a country of the impossible, where there are no bombs yet we are living in a war.
A war that exists only for those of us living in this territory.
I live in a country no one understands, which few can really see, where various realities co-exist, and where the truth is murdered time and again.
I live in a country where one has to pay for the audacity of thinking for oneself, for taking on the challenge of seeing life another way.
I live in a country of women who have had to invent and reinvent, time and again, how they live and how to get by.
I live in Venezuela, in a time of an unusual and extraordinary threat.
Since 2012 my country has been subjected to an unconventional war. There are no defined armies or fire power. Their objective is to dislocate and distort the economy, affecting all households, daily life, the capacity of a people to dream and build a different kind of politics, an alternative to the patriarchal, bourgeois, capitalist democracy.
Venezuelan women are the primary victims of this economic war. Women who historically and culturally are responsible for providing care, are the most affected and in demand. However, in these years of economic and financial embargo, Venezuelan women have gone from being victims to the protagonists on the front lines defending our territory.
Battles are fought from the barrios, kitchens, and small gardens. We defend the right of girls and boys to go to school, and to be given something so simple as some arepas for breakfast.
Arepas are a kind of corn cake that can be fried, roasted or baked and served sweet or savoury as a side or main dish. It is a staple in the diet of all Venezuelans.
In Venezuela, arepas mean culture, family, food sovereignty, childhood nostalgia, the expert hands of grandmothers molding little balls, the warmth that comforts you when recovering from illness.
Arepas connect us as a people with the pre-Colombian cultures of corn, a resistance that has endured for more than five centuries. They are the Caribbean expressed differently on firm ground.
They are an act of resistance.
When my mother was a girl, they would start grinding the dry corn early in the morning to make arepas. The women would get up and put the kernels of corn in wooden mortars and pound it with heavy mallets to separate the shells. Then they would boil, soak, and grind the corn to make dough, and finally they would mold it into round arepas. The process would take hours and demand a lot of physical effort.
In the mid-20th century a Venezuelan company industrialized the production of corn meal. For an entire generation that seemed like an act of liberation, since there was now a flour that you could simply add water to and have hot arepas in 45 minutes time.
But that also meant that the same generation would lose the traditional knowledge on how to make them from scratch. My grandmother was an expert arepa maker, my mother saw it as a girl, and for me the corn meal came pre-packaged.
In the war with no military, the pre-cooked corn meal came to be wielded as an instrument of war by the same company that invented it, which was not so Venezuelan anymore: today the Polar group of companies is transnational.
We women began to recuperate our knowledge by talking with the eldest among us. We searched in the back of the closets for our grandmothers’ grinders, the ones we hadn’t thrown away out of affection. Some families still prepared the corn in the traditional way for important occasions. In some towns there were still communal grinding stations which had been preserved as part of local history or because small family businesses refused to die. All of these forms of cultural resistance were activated, and we even went so far as to invent new arepas.
Today we know that in order to resist we cannot depend on one food staple. Although corn arepas continue to be everyone’s favourite, we have invented recipes for arepas made of sweet potato, cassava, squash, and celery root.
We have learned that we can use almost any root vegetable to make arepas. Cooperative businesses have developed semi-industrial processes to make pre-cooked corn meal. In other words, we have recuperated our arepas and their preparation as a cultural good that belongs to all.
My artivism aims to decolonize our senses in everyday life. I like to create spaces that communicate how we weave together our different struggles, and that render visible dissident (re)existences, other possible worlds, and living bodies here in the SOUTH.
As we continue to fight in our struggles, let us remember how essential it is that we support each other, believe each other, and love ourselves and our sisters. When this system fucks us over, we must take time to look after our (physical and mental) health, that of our sisters, and to understand that each one of us carries unique stories, making us fighters in resist
Marga RH (@Marga.RH)
Until dignity becomes a habit
These portraits are inspired by the voices of resistance and protest movements in Latin America, especially by the key role that feminised bodies play in these struggles. It is a tribute to the grassroots feminist movements in resistance.
Tenemos el placer de presentarte a Sopo Japaridze, feminista feroz, líder sindical y presidenta del sindicato independiente de servicios Red de Solidaridad.
Dejó el país cuando era muy joven para ir a los Estados Unidos, donde se volvió políticamente muy activa como organizadora laboral. Siempre mantuvo a Georgia en su mente todo ese tiempo, hasta que un día, dos décadas después, decidió regresar.
La confederación sindical georgiana existente en este momento era menos que ideal. Entonces, equipada con sus habilidades, conocimientos y experiencia en organización laboral, Sopo regresó a Georgia y formó su propio sindicato.
También es una apasionada investigadora y escritora. Estudia relaciones laborales y sociales, escribe para varias publicaciones y es una de lxs editorxs de Left East, una plataforma analítica de Europa del Este. También cofundó la iniciativa y el podcast de historia política, Reimaginando la Georgia soviética, donde explora las complejidades y los matices de las experiencias del país bajo la Unión Soviética, para entender mejor su pasado y construir un futuro mejor.
A minha participação é confidencial?
É claro que sim. As suas respostas serão eliminadas no final do processamento e da análise dos dados, e só serão usadas para fins de investigação. Os dados NUNCA serão divulgados fora da AWID e serão processados apenas por colaboradores e consultores da AWID que trabalham no projeto WITM connosco. Damos prioridade à sua privacidade e ao seu anonimato. Consulte a nossa política de privacidade detalhada aqui.
Reason to join 4
Piensa en grande. Gracias a nuestro alcance internacional, podemos combinar el trabajo analítico con herramientas políticas y prácticas para la incidencia y la transformación, con el objeto de promover la causa de los movimientos feministas en todos los ámbitos.
Carol Thomas was a trailblazer for women’s sexual and reproductive rights in South Africa. A gifted gynecologist and founder of the WomenSpace, she practiced and advocated for non-traditional ways of delivering healthcare to women, offering services that were high quality, empathetic and accessible.
“She entered into not only the joy of pregnancies and new babies, but the anxieties of infertility and premature deliveries and female cancers, the heartbreak of miscarriages and stillbirths.” Helen Moffett
Carol thought in new paradigms that centered the needs of women with the least access to services and rights in society:
“The prevailing socio-economic environment that we find ourselves in means that women bear a disproportionate burden of disease and unemployment…As a black, previously disadvantaged woman I have a good sense of what is happening in our communities.” - Carol Thomas
Carol’s innovative and multi-award-winning social venture “iMobiMaMa” used mobile kiosks and interactive technology to connect women directly with antenatal and reproductive health services, information and support in communities all over South Africa.
Carol supported women both in wanted and unwanted pregnancies, mentoring many nurses and doctors during her lifetime.
She was also described as the go-to gynecologist “for trans folks who could have affirming care. She got it right when so many did not have the language or pronouns. Her warm blankets, listening and saying just what you needed to hear was so comforting.” -Marion Lynn Stevens
Carol Thomas was described as being at the height of her professional career when she died on 12 April 2019 of complications following a double lung transplant.
The tributes that poured in following her unexpected death referred to her as many things:
Estas obras son un trabajo colaborativo de fotografías e ilustraciones realizadas por Siphumeze y Katia durante el confinamiento. Muestran narrativas negras queer de sexo y placer, bondage, sexo seguro, juguetes, salud mental y sexo, y mucho más. Fueron creadas para acompañar la antología Touch.
“Mental Health” [«Salud mental»]“Sex and Spirituality” [«Sexo y espiritualidad»]“Orgasm” [«Orgasmo»]
About the Artists:
Siphumeze Khundayi es una creadora de arte, fotógrafa y facilitadora interesada en las formas creativas de unir el diálogo y la práctica artística en relación con la identidad queer africana.
Es directora creativa de HOLAAfrica!, una colectiva en línea mujerista panafricanista.
Sus trabajos de performance individual y en colaboración han sido presentados en numerosos festivales y espacios teatrales, tales como el Ricca Ricca Festival de Japón.
En 2017 y 2018 dirigió dos producciones que fueron nominadas a los Naledi Theatre Awards y, en 2020, obtuvo un premio Standard Bank Ovation.
Como fotógrafa, participó en Italia en una exposición grupal titulada Flowers of my Soul, organizada por The Misfit Project. Produjo tres publicaciones para HOLAAfrica!, y sus trabajos fueron publicados dentro y como tapa del Volume Two: As You Like de las Gerald Kraak Anthologies.
Katia Herrera es una artista visual digital de 21 años, de la ruidosa ciudad de Santo Domingo, en la República Dominicana. A pesar de que se autodefine como introvertida, su obra es notablemente estruendosa en un mundo que intenta acallar las voces negras. Con títulos como “Black Woman” [«Mujer Negra»], “You Own the Moon” [«La Luna es Tuya»], “Earth Goddess” [«Diosa de la Tierra»], “Forever” [«Por Siempre»] y “Universe Protector” [«Protectora del Universo»], el legado de Herrera estará marcado por su pasión por poner de manifiesto la resistencia y la perseverancia de las personas negras del pasado y del presente, en contraposición a la narrativa de que la piel negra debería solamente ser asociada con la esclavitud.
Una de sus obras más hermosas y vivazmente tituladas, “Universe Protector”, representa al alma negra como una entidad divina plena de fortaleza, poder y grandeza. En su juventud, su amor por el diseño gráfico se vio estimulado por el talento artístico de su madre y su padre, y por el programa Photoshop que habían descargado en su computadora para su trabajo profesional de fotografía.
La plupart des États membres de l'Union européenne ont des lois et des pratiques qui pénalisent ou contrôlent de facon inacceptable le travail des travailleur·euses du sexe. La criminalisation des travailleur·euses du sexe et/ou de leurs client·e·s ne fait que contribuer à accroître la vulnérabilité des travailleur·euses du sexe, qui sont déjà confronté·es quotidiennement à la stigmatisation, à la discrimination et à l'exclusion de l'État et de la société, en particulier les femmes, les personnes trans, les migrant·e·s et/ou les travailleur·euses racialisés. En Espagne par exemple, le gouvernement essaie actuellement de faire passer une Loi pour l'Abolition de la Prostitution, ce qui entraînera plus de marginalisation et de violence. Venez entendre les histoires de travailleuses du sexe et d'organisatrices syndicales qui luttent pour décriminaliser le travail du sexe et promouvoir les droits et conditions de travail décentes pour les travailleur·euses du sexe.
nous croyons en une application complète du principe des droits, y compris ceux établis dans les lois internationales, et affirmons la conviction que tous les droits humains sont indissociables, interdépendants et indivisibles. Nous nous engageons à œuvrer pour l'éradication de toutes les discriminations fondées sur le genre, la sexualité, la religion, l'âge, les capacités, l'ethnicité, la race, la nationalité, la classe sociale ou d'autres facteurs.
Mereani Naisua Senibici, también llamada "Sua", fue, durante mucho tiempo, integrante del movimiento de la Asociación Cristiana de Mujeres Jóvenes de Fiji (YWCA, por sus siglas en inglés).
Trabajó con diversos grupos de mujeres en entornos multirraciales, rurales y urbanos y se comprometió a apoyar y promover los derechos de las mujeres y las jóvenes.
En el YWCA de Lautoka, Sua trabajó con mujeres de ascendencia india, y se convirtió en una figura destacada en el desarrollo del deporte y de la participación de atletas mujeres y personas trans en Lautoka.
"Sua es muy querida por lxs integrantes del YWCA de Fiji, a causa de su dedicación y apoyo persistente a todo lo que la organización se ha esforzado por hacer". - Tupou Vere
Mereani formaba parte de House of Sarah [La Casa de Sarah] (HoS, por sus siglas en inglés ), una iniciativa de la Asociación de Mujeres Anglicanas (AAW), lanzada en 2009, que tenía por objetivos tanto sensibilizar sobre los problemas relacionados con la violencia de género, como brindar apoyo a las mujeres que sufren violencia. Mereani empezó como una voluntaria comprometida y ofreció apoyo a las mujeres de todo el Pacífico.
Mereani falleció en 2019.
"Una persona con don de gente y una trabajadora todoterreno en el empoderamiento de las mujeres y construcción de movimientos a nivel comunitario. Descansa en paz, Sua". - Tupou Vere
Colectivo Moriviví est un collectif artistique de femmes. Notre production artistique comprend du muralisme, du muralisme communautaire et des performances/actions de manifestation. Notre travail consiste à démocratiser l'art et à amener les récits des communautés portoricaines dans la sphère publique afin de créer des espaces où ils seront validés. Nous croyons qu’à travers l'artivisme, nous pouvons promouvoir la sensibilisation aux questions sociales et renforcer notre mémoire collective.
“Cacibajagua” 2017, Projet mural. Jiangxi, Chine“Cacibajagua” 2017, Projet mural. Jiangxi, Chine“Paz para la Mujer” (“Paix pour la Femme”) 2015, collaboration avec l’organisation Paz para la Mujer. Santurce, Porto Rico
“Paz para la Mujer” (“Paix pour la Femme”) 2015, collaboration avec l’organisation Paz para la Mujer. Santurce, Porto Rico
Dans le cadre de sa participation au Groupe de Travail d’Artistes d'AWID, le Colectivo Moriviví a réuni un groupe divers de membres, partenaires et personnel pour faciliter un processus collaboratif visant à imaginer, documenter et déterminer le contenu d'une fresque communautaire par le biais d'un processus de co-création en plusieurs étapes. Le projet a commencé par une conceptualisation à distance avec des féministes de différentes régions du monde réuni·e·s par l'AWID, avant d'évoluer vers sa re-contextualisation et sa réalisation à Porto Rico. Nous avons eu l'honneur de bénéficier de la contribution des artistes locaux·ales Las Nietas de Nonó(@lasnietasdenono), de la participation des femmes locales à la session de peinture communautaire, du soutien logistique de la municipalité de Caguas et du soutien supplémentaire du FRIDA | The Young Feminist Fund.
La fresque explore la transcendance des frontières en présentant les corps tels des cartes, dans une étreinte qui met en évidence l'intersection des différentes manifestations, pratiques et réalités féministes.
Nous remercions également Kelvin Rodríguez, qui a documenté et capturé les différentes étapes de ce projet à Porto Rico :
À propos du Colectivo Morivivi
Moriviví est un collectif de jeunes femmes artistes qui travaille sur l'art public depuis Avril 2013. Basé·e·s à Porto Rico, nous sommes reconnu·e·s pour la création de fresques et d'arts dirigés par la communauté.
Le groupe a débuté dans les festivals d'art urbain locaux. Au fur et à mesure que notre travail devenait plus populaire, les organisations et les dirigeant.e.s communautaires ont commencé à nous contacter. Au départ, nous étions huit lycéen·ne·s qui voulaient peindre une fresque ensemble. Cependant, en huit ans de travail acharné, nous avons été confronté·e·s à de nombreux défis. Nous sommes aujourd’hui dans une période de transition. Au cours de l'année qui vient, nous souhaitons restructurer le collectif en interne. Notre objectif est d'ouvrir de nouvelles opportunités pour les collaborateurs·trices et d'étayer notre processus de prise de décisions par un nouveau système d'évaluation. À long terme, nous aspirons à devenir une école alternative de pratiques artistiques pour celles et ceux souhaitant s'immerger dans la production artistique communautaire.
AWID Community is an online social networking platform for specifically for AWID members. It’s a feminist space for connection, resistance and celebration. A space for critical feminist conversations, collective power and solidarity. It is also a space for post-event dialogues, navigating difficult political learnings and community care