Ana fue una firme defensora de los derechos de las mujeres y trabajó con una amplia diversidad de mujeres, desde aquellas que están redes de base hasta las que son parte del sector privado.
Creía que había que tender puentes entre sectores. Ana fue integrante de la Red Nacional de Promoción de la Mujer (RNPM), y tuvo participación activa en el desarrollo de muchos programas sociales que abordan temas como la salud y los derechos sexuales y reproductivos.