«Tu presencia es un vehículo»
¿Qué sucede cuando lxs artistas entran a espacios a los que tradicionalmente no se les invita? Las artes y la cultura son un método inusual con el cual involucrarse en espacios políticos como la 61ª sesión de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de las Mujeres (CSW). Artistas feministas han sido invitadas a participar en un festival organizado por ONU Mujeres para producir películas en torno al tema «Lo personal es político».
Algunxs de estxs artistas discuten cómo las artes y la cultura crean resistencia. Examinamos con ellxs cómo las narraciones personales y artísticas pueden apartarnos de los rígidos confines políticos, académicos e institucionales de los «espacios sobre políticas».
Nayani Thiyagarajah es una realizadora cinematográfica y narradora ubicada en Toronto cuya primera película documental, «Shadeism: Digging Deeper» (2015), examinó cómo la discriminación basada en el color de la piel afecta a su propia comunidad y a otras en diversas partes del mundo. Actualmente está co-produciendo, escribiendo y dirigiendo múltiples proyectos cinematográficos independientes por medio de su compañía productora [RE]FRAME.
Como parte de su participación por primera vez en la CSW61, Nayani estará documentando sus experiencias en el evento haciéndose cargo de la cuenta de Instagram de AWID (@awidwomensrights) y mediante un cortometraje sobre el tema «Lo personal es político». Este cortometraje será proyectado en el evento de ONU Mujeres el 17 de marzo (en inglés). Nayani conversó con AWID sobre sus expectativas, temores, emociones y la importancia de hacerse presente.
AWID: Cuéntanos sobre tu arte, específicamente cómo este crea resistencia y lo que llevarás a un espacio como la CSW.
Nayani Thiyagarajah: El cine es una herramienta para incidencia política y social. Cada película en la cual he trabajado y/o estoy trabajando en la actualidad proviene de un lugar que es profundamente personal. Es algo ya sea que mi familia o yo hemos vivido o afecta a comunidades que considero mías, las cuales son múltiples y abundantes. Extraigo material de nuestras vidas cotidianas, haciéndolas cobrar vida por medio del arte y del cine, dándoles espacio para respirar en la pantalla, pero también para proporcionar narraciones sobre nuestras vidas y contextos desde la perspectiva de nuestras propias experiencias.
Cuando se trata de películas en las que trabajo, soy insistente y pertinaz en que se centren en mujeres negras, indígenas y otras mujeres de color. Es parte de mi ética, especialmente a través del colectivo con el cual trabajo. Nuestros esfuerzos y proyectos son de carácter muy político, pero surgen de un lugar personal. Pueden no leerse como comentarios políticos, pero siempre son una narración sobre nuestras propias vidas.
Por medio de la compañía [RE]FRAME, que cofundé con mi productora, desarrollamos contenidos curriculares y programación en torno a nuestras películas. Una parte clave de nuestro trabajo es pensar en cómo nuestras películas pueden existir más allá de la pantalla y cómo ampliarlas desde el cine hacia las comunidades y las aulas.
AWID: ¿Qué sientes respecto a involucrarte en la CSW desde un enfoque tan personal y artístico, dado que tradicionalmente la CSW ha favorecido el activismo institucional o a académicxs y es un lugar que podría considerarse un «espacio sobre políticas»?
NT: Mentiría si dijera que no es un poco atemorizante para mí. No necesariamente en un mal sentido; es solo que no es un espacio en el que normalmente me involucro. No sé cómo serán las cosas al final, pero me emociona compartir espacio con gente que está trabajando en un ámbito diferente — que yo no conozco — y de quien puedo aprender mucho. Estoy tan habituada a estar con otras personas creativas — ese es el mundo que ocupo y en el cual vivo. Me interesa ver cómo la gente nos recibirá a nosotrxs y recibirá nuestro trabajo, y también ver qué tan seriamente se tomará nuestro trabajo en ese contexto.
En el pasado he tenido mis propias reservas y suposiciones y no quiero aferrarme a ellas para siempre, así que realmente espero que la gente se muestre abierta al tipo de comentario que lxs artistas participantes crearemos allí. También me emociona que ONU Mujeres, AWID y todxs lxs demás socixs nos han brindado este espacio y oportunidad, porque ello refleja un mayor paso en cuanto a que la gente acoja a artistas y narradorxs de esta manera. Especialmente cuando se trata de multimedios y medios mixtos, la forma en que estamos avanzando es a través de esos medios, sobre todo en vista de la cultura en línea en la cual vivimos. Tengo sentimientos encontrados — me siento nerviosa, temerosa y también muy emocionada de estar en ese espacio. Creo que para diferentes personas es importante ocupar espacio en lugares donde tradicionalmente no participan.
AWID: Dijiste que te sientes nerviosa y temerosa respecto a participar en ese espacio. Con iniciativas como estas, ¿temes que a lxs artistas se les involucra como una idea de último momento, o sientes que tú estás en el centro de la programación de la CSW?
NT: He participado en iniciativas cuando acaban de empezar o de ser inauguradas, y eso siempre es una preocupación. Creo que lxs artistas, narradorxs y otras personas, por ejemplo, jóvenes y personas de «otras» identidades (a falta de una mejor palabra), siempre temen que se les invite solo para que luego pueda decirse que estuvieron allí, en vez de que realmente se les haya integrado.
Hasta este momento no estoy segura de cómo serán las cosas cuando llegue allá. Es genial incluir a personas que normalmente no son incluidas en un mundo específico pero, al mismo tiempo, siempre somos cautelosas respecto a cuál rol jugaremos cuando nos invitan a ese espacio. Una parte de mi nerviosismo y temor viene de eso: de que me inviten pero luego no tener la oportunidad de participar plenamente. Muchas personas distintas, en diferentes maneras, ya se han visto en esa situación.
Pero además, dado que es algo tan personal para mí, también es político. El que yo — hija de personas refugiadas y siendo también una mujer racializada del sur de Asia, narradora y realizadora cinematográfica — ocupe un espacio en ese ámbito junto con mi productora, una mujer negra — aun si mis temores se hicieran realidad y en verdad no fuéramos parte de la programación —, y ambas produzcamos ese cortometraje y que la gente lo vea será una muy buena respuesta, pase lo que pase.
AWID: Mencionaste que eres hija de personas refugiadas y hablaste sobre ocupar espacio. ¿Qué sientes acerca de ir a Nueva York y asistir a la CSW en el contexto actual de prohibiciones de viajes y otras restricciones?
NT: Una parte de mí se siente muy en conflicto incluso respecto a cruzar la frontera y asistir al evento. Muchas personas no pueden asistir a la CSW debido a lo que está sucediendo ahora mismo en Estados Unidos. Eso es algo que no puedo ni voy a olvidar. Al mismo tiempo, sin revelar el tema de la película en que estoy trabajando, pienso que es importante que la gente que tiene la capacidad y el privilegio de asistir (¡y es un privilegio!) haga una declaración con su presencia y su trabajo. Yo no iré allá simplemente para hacer una película. Hay una gran intencionalidad detrás de cómo veo mi presencia allí en el actual contexto.
Mi madre y mi padre fueron refugiadxs hace casi 30 años. Ha pasado mucho tiempo, pero esa experiencia nunca te abandona. No fue mi experiencia, sino la de mis mayores, pero puedo ver cómo pervive aun ahora. Así que, viendo el contexto actual, pienso en lo que significa ser portadora de múltiples verdades. De manera que una parte de mí siente que no es correcto que yo esté allí, asistiendo cuando a tantas otras personas no se les permite llegar debido a lo que está ocurriendo políticamente.
Al mismo tiempo, también es importante estar allí y usar tu presencia como un vehículo para el comentario en vez de guardar silencio. Es una pregunta en la que siempre pienso: ¿Cómo accedo a cualquier privilegio que tengo y cómo lo uso para asegurar que mi presencia ofrezca un comentario/crítica? También te hace pensar sobre ti mismx como un cuerpo político. Tu cuerpo no es solamente tuyo. ¿Qué significa el hecho de que tu cuerpo esté allí y que el trabajo que surge de tu cuerpo signifique algo políticamente? Incluso el temor asociado a tener un cuerpo color marrón, subirte a un avión y pasar por la aduana estadounidense—cosas que huelga mencionar, que existieron antes y existen ahora. Estas son preguntas que dan vueltas en mi mente antes de asistir.