Marcha de las Mujeres Afrodescendientes en Brasil – Mensaje de solidaridad del Grupo de Trabajo del Foro sobre Feminismos Negros

Mensagem de solidaridade do Grupo de Trabalho do Fórum de Feminismos Negros 

Los contextos donde operan las feministas afrodescendientes son cada vez más difíciles, a nivel global. En Colombia, las mujeres negras se encuentran en asamblea permanente en la sede del Ministerio del Interior, en La Giralda, desde el 27 de noviembre de 2014, con el fin de defender sus tierras y territorios de la minería,  poner fin a la guerra sobre sus cuerpos y resistir el desplazamiento. En Madagascar, comunidades campesinas y agricultoras hicieron resistencia a la apropiación masiva de tierras, con revueltas que llevaron al gobierno a dar marcha atrás en sus proyectos. En República Dominicana, las políticas de limpieza étnica contra la población afrodescendiente  afectan a trabajadoras y trabajadores migrantes de Haití y a la población dominicana de origen haitiano, a quienes se niega la ciudadanía y se amenaza con deportaciones en masa de proporciones preocupantes. En Estados Unidos, las fuerzas de “seguridad” del Estado asesinan a una persona negra cada 28 horas y se contabilizan  64.000 mujeres negras desaparecidas.

En Brasil, hemos sido testigos  de una violencia asesina por parte de una fuerza policial cada vez más militarizada, dirigida principalmente a gente pobre y de clase trabajadora, inmigrantes e indígenas. Un millón de personas fueron asesinadas entre 1980 y el 2010. El dramático aumento en el número de asesinatos se atribuye, entre otras cosas, a la desigualdad creciente y a un mayor acceso a las armas.

Mientras en la diáspora africana se desata un sentimiento antinegritud, los pueblos del continente africano siguen siendo un reservorio de cuerpos y mano de obra, tierras y recursos para los regímenes sociales y económicos neoliberales en permanente expansión.  En todas partes, la acción coordinada de estructuras antinegritud, capitalistas y patriarcales continúa despojándonos y quitando la autonomía sobre nuestros cuerpos, territorios y recursos naturales. La lucha contra la apropiación de tierras en África es una lucha por la vida y la supervivencia de la gente negra y por un desarrollo autodeterminado. Hemos observado los intentos por desaparecer  las experiencias y vida de las mujeres negras y personas queer de la narrativa identitaria africana.

¡La antinegritud es global, nuestra resistencia también!

Como feministas africanas, procedentes de distintos lugares  del mundo, nos solidarizamos con las mujeres, niñas y personas trans* afrodescendientes de Brasil, en la lucha contra la violencia y el racismo y en la búsqueda del bienestar.

Estamos con ustedes en cada paso del camino, marchando juntas por la liberación y la autodeterminación; por una justicia económica íntegra y un modo de vida sustentable; por el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos y amores; y por el derecho a construir nuestras vidas y comunidades con creatividad, seguridad verdadera y amor.

¡Pamoja! ¡Aluta Continua, Victoria Acerta! ¡Vamos, adelante!