AWID Forum: Co-creating Feminist Futures

In September 2016, the 13th AWID international Forum brought together in Brazil over 1800 feminists and women’s rights advocates in a spirit of resistance and resilience.

This section highlights the gains, learnings and resources that came out of our rich conversations. We invite you to explore, share and comment!


What has happened since 2016?

One of the key takeaways from the 2016 Forum was the need to broaden and deepen our cross-movement work to address rising fascisms, fundamentalisms, corporate greed and climate change.

With this in mind, we have been working with multiple allies to grow these seeds of resistance:

And through our next strategic plan and Forum process, we are committed to keep developing ideas and deepen the learnings ignited at the 2016 Forum.

What happens now?

The world is a much different place than it was a year ago, and it will continue to change.

The next AWID Forum will take place in the Asia Pacific region (exact location and dates to be announced in 2018).

We look forward to you joining us!

About the AWID Forum

AWID Forums started in 1983, in Washington DC. Since then, the event has grown to become many things to many peoples: an iterative process of sharpening our analyses, vision and actions; a watershed moment that reinvigorates participants’ feminisms and energizes their organizing; and a political home for women human rights defenders to find sanctuary and solidarity.

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Fadila M.

Fadila M. was a Soulaliyate tribal activist from Azrou, the Ifrane region of Morocco. She fought against a specific form of land discrimination directed against tribal women.

As part of the Soulaliyate Women’s Land-Use Rights Movement, she worked towards overhauling the framework legislation relating to the management of community property through the 2019 adoption of three projects of laws guaranteeing the equality of women and men.

According to the customary laws in force, women had no right to benefit from the land, especially those who were single, widowed or divorced. The rights to collective land in Morocco were transmitted traditionally between male members of a family of over 16 years of age. Since 2007, Fadila M. had been part of the women’s movement, the first grassroots nationwide mobilization for land rights. Some of the achievements included that in 2012 for the first time Soulaliyate women were able to register on the lists of beneficiaries and to benefit from compensation relating to land cession. The movement also managed to get the 1919 dahir (Moroccan King's decree) amended to guarantee women the right to equality.

Fadila M. died on 27 September 2018. The circumstances of her death are unclear. She was part of a protest march connected to the issue of collective land and while authorities reported her death as being accidental, and her having a cardiac arrest on the way to the hospital, the local section of the Moroccan Association of Human Rights (AMDH) pointed out that Fadila was suffocated by a member of the police force using a Moroccan flag. Her family requested investigation but the results of the autopsy were not known.

Find out more about the Soulaliyate Women’s Land-Use Rights Movement


Please note: As there was no photograph/image of Fadila M. available to us, the artwork (instead of a portrait) aims to represent what she fought and worked for; land and rights to live and have access to that land and what grows on it.

Carta de amor a los movimientos feministas #2

Mi querida colectiva feminista:

Sobres de álbum de recortes, el de arriba dicen Cartas de amor a los movimientos feministas. El sobre en la parte superior dice De: Lina

La integro desde que tengo uso de razón. De jovencita, no sabía que existía una palabra — «feminista»  — para nosotrxs, quienes aspiramos a superar y desmantelar el patriarcado; quienes buscamos refugio en los brazos de la inclusión y la interseccionalidad; quienes tratamos a las personas como iguales independientemente de su género, raza, sexualidad, religión y etnia; quienes estamos continuamente aprendiendo a obrar mejor, a ser mejores y a usar nuestros privilegios para que otras personas mejoren. 

Cuando tenía 14 años, mi profesor de francés de la escuela secundaria, un hombre de 1,80 metros de altura y 30 años de edad, agredió a una alumna de mi clase delante de todxs nosotrxs. La alumna, que era amiga mía desde la infancia, y varias chicas más fuimos a la dirección para denunciarlo, madres y padres se involucraron y toda la clase, treinta alumnxs, expresó su apoyo a la chica. Pero todos nuestros intentos para que el profesor rindiera cuentas por lo que había hecho fracasaron: la administración ocultóó la denunciaa y el profesor nunca fue despedido ni perseguido. Mis compañeras y yo estábamos indignadas, así que hicimos lo que toda joven feminista furiosa haría: LE TIRAMOS HUEVOS A SU AUTO. Si bien los huevos se lavaron con facilidad, costó más sacar la pintura que usamos para escribir las palabras «Cerdo» y «Khamaj» (basura). Nunca olvidaré cómo nos hizo sentir eso: liberadas, enfurecidas, felices, muy unidas y con poder. La misma emoción se repite en todos los ámbitos feministas en los que he estado desde entonces. La feminista adolescente que hay en mí creció y participó en Women Deliver, AWID, Unootha, facilitó talleres feministas en la universidad, e incluso fue perseguida por su filiación feminista a los 19 años, pero esa es otra historia para otra carta. 

Los movimientos y espacios feministas me brindan seguridad y empoderamiento. Son las madres que hubiéramos deseado tener y los vínculos que necesitábamos para conectarnos y organizarnos, a pesar de nuestras diferencias, contra un enemigo común, el patriarcado, que nos ha estado perjudicando a todxs. Con ustedes aprendí a ser resiliente y a reunir mis fuerzas y habilidades para estimular a otras personas, para sacar a la luz la situación de las personas marginadas, y dar voz a quienes no la tienen.

Lo que más me gusta de ustedes, movimientos feministas, es que a veces hacen mal las cosas, desprecian y también marginan, tienen prejuicios como cualquier otro movimiento, pero lo que los diferencia es que siempre se esfuerzan por ser mejores. La rendición de cuentas no es algo a lo que le teman, y son un colectivo en constante cambio que refleja cómo el altruismo y la filantropía que se proponen lograr la equidad de género también cambian con el paso del tiempo. 

Que crezcan siempre, que obren mejor, que siempre se enfurezcan, que siempre rujan, que siempre amen, que siempre hablen distintas lenguas y que siempre sientan su poder. 

Amor, luz y rabia, 
Lina

Snippet FEA Nous Sommes la Solution (ES)

The logo of We Are The Solution with green silhouettes of four rural woment

Nous Sommes la Solution es un movimiento de mujeres rurales por la soberanía alimentaria en África Occidental. Originalmente fundada como una campaña contra la agricultura hiper-industrializada, Nous Sommes la Solution se ha convertido en un movimiento de más de 500 asociaciones de mujeres rurales de Burkina Faso, Senegal, Ghana, Gambia, Guinea Bissau, Malí y Guinea.

Este movimiento liderado por mujeres está construyendo y fortaleciendo la soberanía alimentaria y de semillas en África Occidental. Alimentan a las comunidades, fortalecen las economías locales, amplían el conocimiento de las mujeres agricultoras y mitigan los efectos devastadores de la crisis climática a través de las prácticas agroecológicas. También organizan talleres, foros y transmisiones de radio comunitarias para compartir sus mensajes, conocimientos tradicionales y prácticas agroecológicas en las comunidades rurales.

En colaboración con universidades y centros públicos de investigación, Nous Sommes la Solution trabaja para restaurar las variedades indígenas de arroz (un alimento esencial de África Occidental) y promover economías alimentarias locales basadas en principios agroecológicos para influir en la formulación de políticas nacionales, mientras apoya a las mujeres en la creación de asociaciones agrícolas y su acceso a la propiedad y gestión colectiva de las tierras agrícolas.

Snippet - WITM Why now_col 1 - PT

Por que devo responder à pesquisa agora?

A monochromatic orange illustration of a woman with curly hair with her hand on her chin. She seems to inquisitive or posing a question.

Os movimentos feministas, de direitos das mulheres, de justiça de género, de LBTQI+ e de aliados em todo do mundo encontram-se num momento crítico, e enfrentam uma forte retaliação contra direitos e liberdades conquistados anteriormente. Os últimos anos trouxeram o crescimento rápido do autoritarismo, a violenta repressão da sociedade civil e a criminalização dos defensores dos direitos humanos das mulheres e de pessoas de género diverso, o aumento da guerra e do conflito em várias partes do nosso mundo, a perpetuação contínua de injustiças económicas e crises de saúde, da ecologia e do clima interligadas.

Rosa Candida Mayorga Muñoz

Rosa Cándida Mayorga Muñoz fue una trabajadora social guatemalteca, líder sindical y defensora de los derechos laborales. La llamaban cariñosamente «Rosita».

En la década de 1980, Rosa se convirtió en la primera mujer integrante del Comité Ejecutivo del Sindicato de Trabajadores del Instituto Nacional de Electrificación (STINDE), un sindicato al que se había incorporado originalmente para defender los derechos laborales de las mujeres. Para ella, esto significaba luchar por la igualdad de oportunidades en una empresa en la que muchas mujeres enfrentaban un sistema discriminatorio y violento creado por las autoridades de la compañía. Rosa también había sufrido acoso sexual en su lugar de trabajo, tanto por parte de sus compañeros de trabajo, como de los funcionarios. Sin embargo, no era alguien a quien se pudiera acallar.

Rosa continuó con su pelea y fue parte del esfuerzo por configurar la lucha en una forma más específica, la del «Pacto colectivo de condiciones de trabajo INDE -STINDE». Este pacto fue pionero: el primero en tipificar el concepto de acoso (sexual) en Guatemala. Sirve como referencia para la legislación guatemalteca en temas laborales, y es un estímulo para otros sindicatos.

«No tenía herramientas de lucha más que sus propios ideales... Muchas veces fue intimidada, hostigada para dejar por un lado la lucha, pero su valentía a enfrentar generaba la imagen de la esperanza para los sindicalistas de bases. Rosita se trazó una imagen de respeto, no solo dentro de su sindicato, sino ante las autoridades de la institución, ante el movimiento de mujeres; fue reconocida, como pionera, del movimiento de mujeres sindicalistas, en un espacio que había sido más desarrollado por hombres.» - Maritza Velasquez, ATRAHDOM

Rosa falleció el 4 de abril de 2018, a la edad de 77 años.

Love letter to Feminist Movements #8

Dearest Beloved Feminist Movements,

Hello again, and again, and again. I have known and loved you my entire adult life, since I first met you meaningfully, after graduating from university. I’d seen you one time before then. That was you appearing as Betty Friedan on a local TV talk show in the US Midwest, in the late-1960s. At the time, Mrs. Wells, my other mother, and I commented on what wild, far-fetched ideas this woman was trying to convince us about. Decade after decade since then I have fallen more deeply in love with you, Beloved, and understand and witness your political and theoretical brilliance, ethical and moral authority, creativity, joy, and love, above all. Nearly 60 years later, I know we are partners forever.

Love letter to feminist movements from Your dramatically cloaked jungle nymph.

The early years of our acquaintanceship was ok. I was quite self-involved--figuring racial, gender, and sexual identity; getting clear on my core politics, values, and ethics; completing my formal education--and you provided numerous settings, intellectual drop-in centers, and comforting holding environments where and through which I was able to craft the young-adult building blocks of the feminist and human being whom I would become.

The predominantly white women’s movement of Cambridge and Boston, including Daughters of Bilitis, was my starting place. That suited me at the time but soon realized I desired something more. Poof! Like magic (serendipity), I connected with a small group of radical, anti-imperialist, Black, socialist lesbian women and we soon became the Combahee River Collective. 

That early Combahee experience, combined with critical life lessons and particular African-American/Korean immigrant racial politics of early-1990s in the US, prepared me for the journey that has led me to identify and work as a transnational feminist to address militarism and to dedicate myself to imagining other worlds where all living beings will thrive.

The next two critical women’s-movement moments were decades after Combahee years but deeply linked. First was meeting and being invited into the Korean feminist movement organizing against US military bases and supporting the “kijichon women” the Korean women whose lives, including for some, their mixed-race children, revolved around servicing US military personnel in numerous ways in villages and towns adjacent to the bases. Korean Beloved Feminists, especially Kim Yon-Ja and Ahn Il-Soon, the first sisters I met and traveled with, made me see and understand the critical importance of nation as an analytical and organizing principle. The “capstone” was living, working in occupied Palestine. The late Maha Abu-Dayyeh introduced me to the Palestinian women’s movement, with a profound comment, “you can leave Palestine but Palestine will never leave you.” So true. And, all my work and experiences across many borders brought me to AWID--my second home.

As you know, Beloved, being with you has not been easy or simple. Indeed, you are demanding, consistently riddled with contradictions, and sometimes even hurtful. Nonetheless, you continue to grow and develop, as you are supporting my political, emotional, and spiritual growth and development.  I guess we are growing each other--a very profound process to which I will dedicate the rest of my time in my current form.

The through-line of being with you all these decades is this: 

Feminists Collectively Engaging the Heads, Hearts, Hands, and Spirits to transform our worlds

This is chart with 7 consecutive circles arranged in a circumference. Each one is separated by an arrow which makes the chart a loop. Starting at the top, and following left to right, the circles say: #1 reflecting on individual experiences, #2 story-telling collectively, #3 theorizing, #4 visioning, #5 acting and reflecting, #6 re-visioning, #7 ethic of humility, care, joy, love.

 

So much love, Feminist Movements!

Your Margo
AKA DJ MOR Love and Joy

Wellfleet Massachusetts USA

Snippet FEA What are the objectives (FR)

Quels sont les Objectifs de Nous Sommes la Solution?

Snippet - WITM RESOURCES - RU

Ресурсы

(Доступно на английском языке)

Body

Mirna Teresa Suazo Martínez

Mirna Teresa Suazo Martínez faisait partie de la communauté garifuna (afro-descendante et autochtone) Masca et vivait sur la côte nord des Caraïbes du Honduras. Elle était leader de sa communauté et fervente défenseure du territoire autochtone, une terre qui a été violée le jour où l'Institut national agraire du Honduras a accordé des licences territoriales à des personnes extérieures à la communauté. 

Ce fait déplorable a été à l'origine de harcèlements, d'abus et de violences répétés contre Masca, où les intérêts économiques de différents groupes se sont heurtés à ceux des forces armées et des autorités honduriennes. Selon l'Organisation fraternelle noire du Honduras (OFRANEH), la stratégie de ces groupes consiste à expulser et exterminer la population autochtone. 

« Masca, la communauté garifuna située près de la vallée du Cuyamel, se trouve dans la zone d’influence de l’une des villes présumées modèles, une situation qui a déclenché des pressions territoriales le long de la côte garifuna. » - OFRANEH, 8 septembre 2019

Mirna Teresa, présidente du conseil d'administration de la communauté de Masca à Omoa, avait elle aussi fermement rejeté la construction de deux centrales hydroélectriques sur la rivière Masca, qui porte le même nom que sa communauté.

« La communauté garífuna attribue l'aggravation de la situation dans leur région à son opposition à l'exploitation touristique, à la monoculture de palmiers africains et au trafic de drogue, tandis qu'elle cherche parallèlement à construire une vie alternative au travers de la culture de la noix de coco et d'autres produits d'autoconsommation ». - Voces Feministas, 10 septembre 2019 

Mirna Teresa a été assassinée le 8 septembre 2019 dans son restaurant « Champa los Gemelos ». 

Elle est l'une des six femmes défenseures garifunas à avoir été assassinées rien qu'entre septembre et octobre 2019. Selon l'OFRANEH, les autorités n'ont pas mené d'enquête sur ces crimes.

« En ce qui concerne les communautés garífuna, une grande partie des homicides sont liés au régime foncier et à la gestion des terres. Cependant, les querelles entre les organisations criminelles ont abouti à des meurtres, à l’instar de ceux ayant eu lieu récemment à Santa Rosa de Aguán ». - OFRANEH, 8 septembre 2019

Carta de amor a los movimientos feministas #9

El cuerpo es una entidad poderosa. Por ser mujeres, nuestros cuerpos son controlados, oprimidos y vigilados desde que estamos en el útero. Nuestro aspecto, la forma en que nos movemos, nos vestimos, caminamos, hablamos, gesticulamos, reímos. A menudo me he preguntado qué es lo que genera los temores patriarcales respecto del poder de los cuerpos femeninos.

En el lugar de donde provengo, se murmuraba sobre el trabajo sexual y lxs trabajadorxs sexuales con desprecio, asco, fascinación, lástima y condena, todo en simultáneo.

Cartas de amor a los movimientos feministas De Khin Khin

Descubrí el trabajo sexual y a lxs trabajadorxs sexuales cuando tenía 22 años. En conversaciones sencillas, sentadxs en círculo, charlando mientras tomábamos café y té, explorábamos nuestras vidas, experiencias, pensamientos y sentimientos.

Para lxs trabajadorxs sexuales, el trabajo sexual era la opción más conveniente de todas, para pagar las cuentas, para sostener a la familia, para tener un horario laboral más flexible, para tener sexo. Así elegí mi trabajo, como el más conveniente, para pagar las cuentas, para sostener a la familia, para tener un horario laboral más flexible.

Estas personas, mujeres y hombres, me enseñaron que yo tomaba mis propias decisiones sobre mi cuerpo: dónde focalizo su vida y su energía, si lo uso para el placer o para el dolor, si lo comercializo o lo ofrezco en forma gratuita, y cómo quiero sentirme en relación con mi cuerpo. Esta conciencia fue tan excitante como empoderadora.

Crear | Résister | Transform: un festival para movimientos feministas – 2021… ustedes me acompañaron a lo largo de una serie de momentos que cambiaron mi vida (¡!¡!¡!)

Los llamamos «eventos», pero en verdad, para mí, sus espacios de aprendizaje feministas son el lugar adonde llevo un poco de lo que tengo adentro, y de donde me llevo un poco de lo que dicen sus disertantes y algo de las discusiones que penetran más profundamente en nuestra comprensión.

Compartir... Participar... Sumergirse...
en la fortaleza, en la vulnerabilidad, en el placer.

Simplemente siendo la feminista transformadora que soy, sin pretensiones, sin recelos...

Apreciando a la feminista transformadora que siempre he sido, sin siquiera conocer la palabra ni reconocerla de esa manera o en esos términos...

Encontrar un hogar para la feminista ferozmente transformadora que vive dentro de mí...

A pesar de la ira, la rabia y la frustración por no ser tratada como una igual y ser tratada como alguien «menos _ que».

No siempre me consideré feminista ni me reconocí a mí misma dentro del movimiento feminista o del discurso feminista. De verdad, aprecio que las puertas me fueran abiertas, que se me acercaran sillas para sentarme, el reconocimiento como mujer, el reconocimiento de mi feminidad.

Algunas veces desestimé al patriarcado con fastidio, otras veces respondí con frustración y enojo, pero no lo enfrenté... no notaba su toxicidad siniestra e insidiosa... era lo suficientemente privilegiada como para poder trabajar a través de él, para sobrevivir a él, para superarlo, para destacarme a pesar de él... no lo cuestionaba lo suficiente, no lo desafiaba lo suficiente, no sobrepasaba mis límites lo suficiente... no hacía lo suficiente...

…conectándome con trabajadorxs sexuales, explorando la sexualidad y las mujeres para tener paz y seguridad…

Hasta que fui plenamente consciente y comprendí las implicancias tanto del privilegio como de la opresión que eran interseccionales.
Hasta que me di cuenta de lo que significaba pelear por la justicia de género y no simplemente por la «igualdad para todxs».

Ya no más practicante y facilitadora: soy una practicante y facilitadora feminista transformadora.

Ser feminista significa que voy a actuar

  • –a través de mis actividades cotidianas: la forma en que vivo, el trabajo que hago, los procesos que se me invita a liderar, los talleres y las conferencias que se me invita a dar–
  • para resistir contra la toxicidad del patriarcado, para desmantelar las estructuras y los sistemas patriarcales,
  • para trabajar con vistas a descolonizar valores, creencias, pensamientos, y destruir los mitos de las normas y las expectativas de género,
  • para enfrentar los desequilibrios de poder impuestos por las creencias y la socialización patriarcales,
  • para fomentar relaciones construidas sobre la base de la inclusión, el holismo, la igualdad, el cuidado, la reciprocidad, la responsabilidad y la justicia,
  • para ponerme de pie y actuar en solidaridad en las primeras líneas de la lucha por la inclusión, la equidad y la justicia.

Zambulléndome en un futuro incierto, frágil, complejo (y posiblemente bastante violento)…

  • quiero descubrirme a mí misma y ser yo misma de forma más íntima, más auténtica y más profunda a través del movimiento...
  • quiero involucrarme más activamente y estar más interconectada a través de esta relación amorosa.

Estoy profundamente agradecida por tenerlxs a ustedes y les prometo continuar siendo implacable al enfrentar y reparar los temas problemáticos relacionados con el género, la raza, la etnia, la clase social, la orientación sexual y la capacidad, y seguir estando presente y siendo fiel a la lucha por la inclusión, la equidad y la justicia.
 
- Khin Khin

Snippet FEA NSS Quote (EN)

“It’s the indigenous knowledge and the practices that have always supported food sovereignty and this knowhow is in the hands of the women … Ecofeminism for me is the respect for all that we have around us.”

Mariama Sonko
Interview to The Guardian

Quem deve participar no inquérito?

Grupos, organizações e movimentos cujo foco específico ou principal seja os direitos das mulheres, de jovens, a justiça de género, os direitos das pessoas LBTQI+ e de aliados em todas as regiões e em todos os níveis, quer sejam novos ou já estabelecidos.

Stacey Park Milbern

“I do not know a lot about spirituality or what happens when we die, but my crip queer Korean life makes me believe that our earthly bodyminds is but a fraction, and not considering our ancestors is electing only to see a glimpse of who we are.” - Stacey Park Milbern

Stacey Park Milbern was a self-identifying queer disabled woman of colour and a trailblazer. A long-standing and respected organizer and leader in the disability rights and justice movement, she also advocated for the rights of many different communities, not just her own. Stacey’s activism had mighty roots in her experience at the intersections of gender, disability, sexuality and race.

Stacey, along with some friends, co-created the Disability Justice Culture Club, a group working to support various and especially vulnerable communities, including helping homeless people gain access to resources during the COVID-19 pandemic. 

She was also a co-producer of an impact campaign for Netflix’s documentary “Crip Camp”, a board member of the WITH Foundation, and led organizations at local, state and national levels. Stacey wrote beautifully and powerfully:

“My ancestors are people torn apart from loves by war and displacement. It’s because of them I know the power of building home with whatever you have, wherever you are, whoever you are with. My ancestors are queers who lived in the American South. It’s because of them I understand the importance of relationships, place and living life big, even if it is dangerous. All of my ancestors know longing. Longing is often our connecting place...” - Stacey Park Milbern

She was born in Seoul, Korea and grew up in North Carolina, later  continuing her journey in the San Francisco Bay Area. Stacey passed away of complications from surgery on her 33rd birthday on 19 May 2020. 


Read an essay by Stacey Park Milbern
Listen to an interview with Stacey Park Milbern
#StaceyTaughtUs: Record your story for the Disability Visibility Project

Tributes:

“She was, a lot of people would say, a leader. She kind of encompassed all of it. You know, sometimes there's like a lead from the front, lead from the middle, lead from the back. And she was just somehow able to do all of that.” - Andraéa LaVant, disability rights activist

“What a blow to lose Stacey when our communities need her leadership more than ever, and at a time when her strength, insight, and grit were receiving increased recognition outside of disability circles, giving her a greater platform to advance her life’s work...We will not have the gift of learning where her charismatic leadership would have taken us. But let there be no doubt: What Stacey gave us, in a relatively short time, will continue benefiting others for years to come.” - Disability Rights Education and Defense Fund (DREDF)

Le monde est venu chez moi : l’histoire de Tidinha

Image de Coverture: Le monde est venu chez moi : l’histoire de Tidinha

 

Comment réagir quand on sent que le monde nous tombe dessus ? Pour Tidinha, ça a été l’occasion de sentir qu’on pouvait l’écouter lorsqu’elle questionnait le choix du lieu, de découvrir qu’elle partageait des visions et des rêves avec d’autres participantes et de réaliser qu’elle n’était pas seule.

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De sa propre voix : regardez l'interview de Tidinha


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