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Front Line Defenders: Asesinato de la defensora de derechos humanos Ruth Alicia López Guisao
WHRDs are self-identified women and lesbian, bisexual, transgender, queer and intersex (LBTQI) people and others who defend rights and are subject to gender-specific risks and threats due to their human rights work and/or as a direct consequence of their gender identity or sexual orientation.
WHRDs are subject to systematic violence and discrimination due to their identities and unyielding struggles for rights, equality and justice.
The WHRD Program collaborates with international and regional partners as well as the AWID membership to raise awareness about these risks and threats, advocate for feminist and holistic measures of protection and safety, and actively promote a culture of self-care and collective well being in our movements.
WHRDs are exposed to the same types of risks that all other defenders who defend human rights, communities, and the environment face. However, they are also exposed to gender-based violence and gender-specific risks because they challenge existing gender norms within their communities and societies.
We work collaboratively with international and regional networks and our membership
We aim to contribute to a safer world for WHRDs, their families and communities. We believe that action for rights and justice should not put WHRDs at risk; it should be appreciated and celebrated.
Promoting collaboration and coordination among human rights and women’s rights organizations at the international level to strengthen responses concerning safety and wellbeing of WHRDs.
Supporting regional networks of WHRDs and their organizations, such as the Mesoamerican Initiative for WHRDs and the WHRD Middle East and North Africa Coalition, in promoting and strengthening collective action for protection - emphasizing the establishment of solidarity and protection networks, the promotion of self-care, and advocacy and mobilization for the safety of WHRDs;
Increasing the visibility and recognition of WHRDs and their struggles, as well as the risks that they encounter by documenting the attacks that they face, and researching, producing, and disseminating information on their struggles, strategies, and challenges:
Mobilizing urgent responses of international solidarity for WHRDs at risk through our international and regional networks, and our active membership.
Estamos monitoreando cuidadosamente este y otros riesgos, y publicaremos información integral sobre salud y seguridad cuando se abra la inscripción, para que puedas tomar una decisión informada. Además, el formato híbrido está diseñado para ofrecer una experiencia de participación significativa a quienes prefieran no viajar o no puedan hacerlo.
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Front Line Defenders: Asesinato de la defensora de derechos humanos Ruth Alicia López Guisao
«Mientras estaba en la primera línea de la protesta, fui sometida a violencia sexual, a lesiones físicas y a otras formas de violencia. Pero no me detendré hasta que logremos pleno gobierno civil en Sudán. Debemos impedir la militarización del Estado. Nuestros cuerpos no deben seguir siendo tratados como campos de batalla»
dijo Amal,1 una manifestante de 23 años.2
Durante los últimos cuatro años, las mujeres lideraron la revolución en Sudán. Su liderazgo no fue solo callejero, sino que constituyó el poder que impulsó la resistencia constante en todos los niveles. Las mujeres y las jóvenes feministas se convirtieron en la conciencia alerta del movimiento de cambio y democratización sudanés. Desde la primera protesta del 13 de diciembre de 2018 contra el régimen anterior, en la ciudad de Aldmazein, en el área de conflicto del Nilo Azul, las jóvenes estudiantes fueron las voces que demandaron el fin de la dictadura de los militares y los Hermanos Musulmanes, que ya lleva treinta años en el poder.
El movimiento feminista, liderado por mujeres de entre 16 y 35 años, ha entablado una revolución dentro de la revolución en Sudán durante los últimos cuatro años de lucha ininterrumpida. Las potentes voces de las jóvenes que ocupan espacios en las calles, las redes sociales, la sociedad civil y las organizaciones políticas se elevaron lo suficiente como para reconfigurar la opinión pública y desafiar las normas sociales. Por primera vez en la historia de Sudán, las discusiones sobre violencia sexual y de género y sobre los tabúes de la violencia doméstica y los procesos de toma de decisiones dominados por los hombres se convirtieron en debates generalizados. Los equipos de fútbol de mujeres designaron voceras ante los comités de resistencia, y los sindicatos profesionales liderados por mujeres son parte de la expresión de la nueva ola del movimiento feminista de Sudán. El logro más importante es que las jóvenes se identifican como feministas en forma orgullosa y pública, en un país regido por el fundamentalismo islámico durante tres décadas. Los jóvenes varones que apoyan el activismo feminista -y se identifican como feministas- son otra señal de progreso notable.
Bajo el actual régimen del golpe militar, las jóvenes que lideran estas iniciativas y los grupos de mujeres que trabajan en el territorio no pueden mencionarse aquí debido a varios problemas de seguridad. Pero su resiliencia, su fuerza y su valentía serán incluidas en los libros de historia. Las audaces jóvenes que encabezan la resistencia en las calles y detrás de las pantallas, y que trabajan en diferentes profesiones y áreas de activismo están dando forma al futuro de Sudán. Las jóvenes feministas de Sudán están creando nuevos espacios para que las narrativas y los discursos feministas reestructuren la distribución del poder a nivel político, económico y social.
A pesar de la inmensa violencia, del resurgimiento del islamismo fundamentalista, de la militarización y de la reducción de los espacios cívicos, las activistas feministas de Sudán se mantienen arraigadas en su sororidad. Siguen siendo una gran inspiración para los movimientos feministas de todo el mundo.
Nazik Awad
1 «Amal» es un seudónimo utilizado para proteger a la joven activista citada.
2 Desde 2018, Sudán vive en una revolución constante. Una nueva ola opositora arrancó a partir del golpe militar del 25 de octubre de 2021.
L'AWID n'offre pas de tarif préférentiel pour les groupes, mais nous offrons des réductions d'inscription à nos membres. (Cliquez ici pour savoir comment devenir membre)
À la Commission africaine et au Système interaméricain, les antidroits promeuvent les notions essentialistes de culture et de genre pour miner les avancées en matière de droits et décrédibiliser la redevabilité. Les antidroits gagnent en influence dans les systèmes de protection des droits humains régionaux et internationaux.
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When thousands of feminists come together, we create a sweeping force of solidarity that has the power to change the world. The AWID Forum will be a moment for us to rest and heal together, connect across borders, and discover brave new strategic directions.
The date and location will be announced next year, as soon as we can. We’re excited and we know you’re excited too. Stay tuned!
Make sure to follow us on social media and subscribe to our mailing list to stay informed!
Yes! We are currently exploring innovating technologies to allow for meaningful connection and participation.
Want to bring people together to strengthen resistance? This methodology for workshops offers group exercises to increase collective knowledge and power, with options to adapt to your needs.
Esta historia es sobre la manera en que un grupo cada vez más diverso de feministas del Pacífico se organizaron a lo largo de los años para asistir a los Foros de AWID, y el modo en que ese proceso lxs transformó en forma personal, como organizaciones y como movimiento a través de lo que aprendieron, descubrieron y experimentaron. Ilustra la importancia de los Foros como espacio que permitió que una región que tiende a ser marginada o ignorada a nivel global pueda construir una presencia sólida en el movimiento feminista, que luego es replicada en otros espacios internacionales de derechos de las mujeres.
Nos hemos hecho la misma pregunta y creemos que no hay respuestas simples. Para muchas personas, el Foro de AWID puede ser uno de los pocos viajes internacionales que realicen en su vida. La pandemia nos enseñó las posibilidades pero también las limitaciones de los espacios virtuales para la construcción de movimientos: no hay nada como la conexión en persona. Los movimientos necesitan conexiones transfronterizas para construir nuestro poder colectivo frente a las amenazas que enfrentamos, especialmente la crisis climática. Creemos que el próximo Foro de AWID puede ser un espacio estratégico para abordar estas cuestiones y explorar alternativas al viaje internacional. El formato híbrido del Foro es una parte importante de esta exploración.
As heteropatriarchal capitalism continues to force us into consumerism and compliance, we are finding that our struggles are being siloed and separated by physical as well as virtual borders.
And with the additional challenges of a global pandemic to overcome, this divide-and-conquer strategy has been favorable for the proliferation of exploitation across many areas.
Yet, From September 1 to September 30, 2021, Crear | Résister | Transform: a festival for feminist movements! took us on a journey of what it means to embody our realities in virtual spaces. At the festival, feminist activists from across the world came together, not only to share experiences of hard-won freedoms, resistances, and cross-borders solidarities, but to articulate what a transnational form of togetherness could look like.
It is this togetherness that has the potential to defy borders, weaving a vision for a future that is transformative because it is abolitionist and anti-capitalist. Spread out over a month, across digital infrastructures that we occupied with our queerness, our resistance, and our imaginaires, the festival showed a way to deviate from the systems that make us complicit in the oppression of others and ourselves.
Though Audre Lorde taught us that the master’s tools will never dismantle the master’s house, Sara Ahmed showed us that we can misuse them. Because we had to make space for assembly, in spite of all the other demands on our time, it became possible to imagine a disruption to the reality of heteropatriarchal capitalism.
Now, if we understand assembly as a form of pleasure, then it becomes possible to make the link between transgressive pleasure and transnational/transdigital resistance. Between the kinds of pleasure that challenges borders on the one hand, and queerness, campiness, land and indigenous struggle, anti-capitalism, and anti-colonial organizing on the other.
This issue attempted to capture a sense of how the festival’s exercise in assembly took on multiple shapes and imaginations. Beyond direct collaborations with some of its speakers and dreamers, we brought on a plethora of other voices from the Global South to be in conversation with many of its themes and subjects. Below is a map of some of the festival’s panels that most inspired us.